domingo, 25 de julio de 2021

¿Cómo Caminar Con el Corazón Herido? II Parte




 El 8 de febrero de 2020 fue mi ultima publicación, después de ello continúe caminando con el corazón herido, pero vi que ya no sangraba, pues la herida empezó a cerrar, únicamente con la ayuda de Dios, sin embargo el proceso de sanación no es fácil, y no hay un manual para seguir, pero si hay alguien que constantemente nos lleva de la mano. El Tiempo ha seguido su camino, no se ha detenido ni por un segundo, tiene que avanzar y en su avance no repara lo que se lleva consigo, el año 2020 el tiempo se ha llevado a muchas personas, ahora no voy sola en mi camino a la sanación me acompañan todos los hijos, hijas, esposas, esposos, madres y padres que debido a esta terrible enfermedad que ni me atrevo a mencionar, no pudieron sostener la mano de su ser amado, ese privilegio que yo si tuve, de poder despedirme y decirle te amo a mi padre.

El tiempo no pregunta si hemos hecho o dicho lo que debimos en el momento oportuno, especialmente ahora que la comunicación entre familias y amigos es tan complicada, porque preferimos estar en el celular viendo cualquier cosa o publicando cualquier cosa, que no vemos lo importante, y cuando la tragedia de perder a ese ser amado toca la puerta, quisiéramos poder dicho o haber hecho algo con ellos, y entran los remordimiento y sentimientos de culpa, porque no nos aseguramos que esa persona supiera cuanto le amábamos; pero Dios padre es tan amoroso con nosotros que promete en Salmos 34 :18 "El Señor está cerca de los que tienen el corazón quebrantado; libra a los de espíritu abatido". Él sabe y conoce lo que nuestro corazón siente, pero espera a que le contemos y le pidamos su ayuda, no dudemos de ello, escuche una vez a alguien decirme que Dios no existe y que era ateo, en ese momento no supe que decir pues se que él existe y me ha ayudado a seguir adelante a pesar de mi corazón herido, posteriormente escuche una anécdota, " un pastor que entro a una peluquería a cortarse el cabello, en la conversación de seguro el pastor le hablaba de Dios y su amor, pero el peluquero no creía en Dios y en su existencia y le comento "Dios no existe" el pastor le pregunto ¿Cómo el podía afirmar eso? a lo que contesto, "Solo tiene que mirar el sufrimiento de la gente, la maldad y la miseria" el pastor salió de la peluquería y se encontró con un hombre con el cabello extremadamente largo y sucio, la barba sumamente larga, al verlo regreso y le dijo al peluquero "Los peluqueros no existen" él le respondió "Claro que si, yo soy uno, ¿Por qué dice Ud. eso? el pastor le mostro al hombre con cabellos largos, el peluquero le dijo: ¿Si ellos no vienen a mí, cómo puedo yo cortarles el cabello? el pastor sonrió y le dijo: "Lo mismo pasa con Dios, si nosotros no vamos a él, ¿Cómo puede él hacer algo por nosotros si no se lo pedimos?" .... 

Es así de sencillo solo debemos abrir nuestro corazón para que Dios desde adentro pueda hacer el milagro de curar nuestras heridas. Este año 2021 no ha sido diferente, talvez con menos intensidad la terrible enfermedad ha seguido haciendo lo suyo y el tiempo no se ha detenido, el continua. En Junio partió al cielo una persona que fue parte de mi vida, ella podría decir que la mejor amiga de mi mami, y la madre de mi hermana del Alma y Corazón, y de mi querido Koky quien se fue mucho antes, no fue de la enfermedad actual, era ya su hora, no pude verla en persona, solo con una video llamada y poco pude decirle, hubiera querido decirle algo más, pero se que sabia lo mucho que la quería y lo importante que ella era para mí, ella fue una bendición para mi madre y para mis hermano y para mí, de nuevo mi corazón marco otra herida... y el tiempo no dejo de avanzar  y   El 31 de mayo tuvimos otra perdida, como si no bastara .. no fue por la horrible enfermedad, fue diría yo. solo el momento que debía partir, fue una persona muy admirada y querida, alguien que tenia un sueño y no permitió que el tiempo lo cuartará, hizo todo lo que se propuso, vivió su vida al máximo, su gran personalidad y carisma hizo que muchos le admirásemos y apreciáramos,  su ausencia ha abierto nuevas heridas en su familia, en sus amigos, en todos los que le conocimos, la tristeza y nostalgia ensombrecen el corazón, pero Dios nos entiende, y si no le contamos y si no le pedimos, él no va obrar y caminaremos con el corazón herido, y no avanzaremos y el tiempo sigue y no se va a detener; solo podemos extender la mano para que Dios no permita que nos desangremos de tristeza,  tomemos otra promesa en Salmos 147 :3 −" Él sana a los quebrantados de corazón y les venda las heridas"  

Sí muchos al igual que yo, caminamos con el corazón herido, pero Dios nos sanara y dará consuelo, pero no seamos como el peluquero incrédulo, vayamos a Dios y él nos sigue prometiendo en Mateo 5 :4 − "¡Dichosos los que lloran, porque serán consolados!"

Dios nos conoce mejor que nadie, y comprende nuestras lagrimas, no es malo extrañar, nos es malo llorar, no es malo añorar; lo malo es que teniendo a Dios, no le pidamos a él sane nuestro corazón.

En memoria de nuestros seres amados que partieron y de los corazones que los extrañamos






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